costo unitario de producción de cada artículo fabricado.
La importancia que tiene el sistema de costo por órdenes de producción es que permite llevar un control de
cada unidad procesada desde el inicio del proceso productivo, hasta el ingreso en la bodega de almacenamiento;
por el gran número de productos fabricados dentro de una industria es indispensable identificar de manera
objetiva los costos que incurren en su fabricación.
El Sistema de Costo por Órdenes de Trabajo a pesar de ser utilizado en las empresas manufactureras donde las
producciones se realizan por pedidos o por lotes, posee varias desventajas, siendo una de las más significativas,
el tratamiento que se le da a los costos indirectos de fabricación. Esta limitación se debe fundamentalmente a
la incorrecta selección de las bases que se utilizan para la distribución de estos costos indirectos entre las
órdenes de trabajo. Es por ello que buscando una mayor exactitud en la asignación de estos costos se sugiere
la utilización del Costeo Basado en Actividades (ABC) ideado por Cooper Robín y Kaplan Robert.
Tanto Robín como Robert justifican su aplicación para intentar dar respuesta a las limitaciones, que, desde un
punto de vista de gestión, planteaban los sistemas tradicionales de contabilidad de costes como podían ser la
incertidumbre creada por la internacionalización de los mercados, la continua evolución tecnológica y la menor
duración de ciclo de vida de los productos, etc. Estas limitaciones tenían como consecuencia una modificación
de las estructuras de costes de las empresas que hacen inválidos los sistemas de costes tradicionales.
El Sistema de Costes Basado en las Actividades (Activity Based Costing), es un modelo que permite la
asignación y distribución de los diferentes costes indirectos, de acuerdo a las actividades realizadas, pues son
éstas las que realmente generan costes. Este sistema nace de la necesidad de dar solución a la problemática que
presentan normalmente los costes estándar, cuando no reflejan fielmente la cadena de valor añadido en la
elaboración de un producto o servicio determinados, y por lo tanto, no es posible una adecuada determinación
del precio.
Este modelo asigna y distribuye los costos indirectos conforme a las actividades realizadas en el proceso de
elaboración del producto o servicio, identificando el origen del coste con la actividad necesaria, no sólo para
la producción sino también para su distribución y venta. La actividad se entiende como el conjunto de acciones
que tiene como fin el incorporar valor añadido al producto a través del proceso de elaboración.
Complementando la definición de actividad, debe mencionarse que el Modelo ABC se basa en que los
productos y servicios consumen actividades, y estas a su vez son las generadoras de los costes.
El costo basado en actividades proporciona una visión contable de los costos a través de las actividades, re
direccionando los gastos reales a la actividad por donde efectivamente pasó el producto. Sin duda el sistema
ABC se presenta como herramienta útil de análisis del consumo de recursos y seguimiento de las actividades,
factores relevantes para el desarrollo y resultado final de la gestión empresarial. López (2015)
Bastidas, J., & Román, L. (2019), refieren que existe influencia positiva el sistema de costos ABC y la fijación
de precios para la toma de decisiones. Siendo una herramienta de vital importancia y efectiva para la asignación
razonable de los costos indirectos, además de permite conocer los costos incurridos en las actividades, siendo
clave para la fijación de precios porque se puede identificar los costos de cada producto.
Según Bertollo (2015) Confirma que, Activity Based Costing es una herramienta de gestión necesaria para la
empresa, para el trabajo la metodología de investigación se clasifico como un estudio cuantitativo-descriptivo,
concluyendo que con la aplicación de la matriz ABC permitió un mejor control de su proceso de producción,